ELCHE. Todos conocemos y seguro que hemos jugado a construir múltiples diseños con Lego, esos pequeños bloques de plástico de colores que incluyen varios pernos para unir unos ladrillos con otros. Sin embargo, la utilidad de estos juguetes de origen danés van más allá del mundo infantil y han comenzado a aplicarse en el mundo de la empresa a través de la metodología Lego Seriousplay.

La nueva utilidad de este juego empezó a plantearse a finales de la década de los 80 y principios de los 90 debido al descenso de ventas de este juguete por la irrupción de las videoconsolas. En esa búsqueda de soluciones para crecer en ventas unieron la parte menos conocida de Lego (Lego Education) con una escuela de negocio y como las piezas de Lego son la esencia de la firma, las llevaron a las sesiones de trabajo y, al manipular los bloques, encontraron una manera de verbalizar ideas distintas.

De ahí surgió esta metodología en la que profesionales como Juan Gadeo, fundador de Sumando Talento y coordinador del área de empresa de Play Factory, se encargan de transmitirla y ponerla en práctica a través de diferentes cursos y actividades como el desayuno formativo que se ha llevado a cabo en el Parque Científico de la Universidad Miguel Hernández de Elche.

La metodología, según Gadeo, “consiste en lanzar retos que suelen ser preguntas, la gente que asiste a la sesión construye la respuesta a ese reto y luego la comparte con el resto de los participantes”.

Con Lego Seriousplay todos los asistentes viven la experiencia y a medida que utilizan las piezas para crear una historia, se van despertando muchas historias nuevas donde una de las cosas más importantes es compartirlas porque es una reunión de trabajo donde todo el mundo participa, señala Juan Gadeo.

“No es una reunión al uso donde el jefe suele hablar y el setenta u ochenta por ciento de la gente que asiste a la reunión no habla o no participa… aquí es al contrario, se lanza una pregunta, la gente construye y de manera individual van contando lo que han construido”.

Del shock inicial a un juego muy serio

Al principio, tal y como relata Juan Gadeo, la metodología les resulta chocante a las personas que participan en estos talleres y, de hecho, en muchas ocasiones los trabajadores no conocen previamente el contenido de la charla para contar con el factor sorpresa.

Sin embargo, después de hacer algo divertido durante los primeros minutos para que la gente se suelte, se empieza a trabajar y unos minutos más tarde “la gente entiende que está jugando pero es un juego muy serio y empieza a ver que surgen conversaciones que no aparecen normalmente por el hecho de utilizar piezas”.

“Al trabajar con las manos y en un entorno de juego, la seguridad que normalmente tenemos a la hora de comunicarnos la bajamos y nos comunicamos de otra forma” es ahí donde las piezas empiezan a dar respuestas reales y donde el resto de participantes interactúa, descubre los proyectos e ideas de cada uno y se implica con sus compañeros.

 Sobre el uso de la metodología para los distintos ámbitos del mundo empresarial, el fundador de Sumando Talento y coordinador de la parte de empresa de Play Factory, asegura que tanto el abanico de posibilidades como el público al que va dirigido es muy amplio. Se puede emplear para trabajadores, mandos directivos, emprendedores… y se puede trabajar desde la psicología positiva a la alineación de equipo o para potenciar la creatividad y crear nuevas propuestas, productos o reorganizar el organigrama de la empresa, entre otros.